domingo, 13 de junio de 2010

Sor Juana Ines de la Cruz Biografia

Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana fue la menor de las tres hijas, María, Josefa y Juana Inés, procreados por Pedro Manuel de Asbaje y Machuca e Isabel Ramírez de Santillana. El padre, militar español oriundo de Vergara, en la provincia vasca de Guipúzcoa, estaba asentado en San Miguel Nepantla. Allí nació, el viernes 12 de noviembre de 1651, en un oscuro lugar llamado por entonces "La Celda", Sor Juana Inés de la Cruz.

La niña pasó su infancia entre Amecameca, Yacapixtla, Panoaya y Nepantla. Allí aprendió náhuatl con los esclavos de las haciendas de su abuelo, donde se sembraba trigo y maíz. El abuelo de Sor Juana muere en 1656, por lo que su madre toma las riendas de las fincas. Asimismo, aprendió a leer y escribir a los tres años al tomar las lecciones con su hermana mayor a escondidas de su madre.

Pronto iniciaría su gusto por la gramática, el latín y las obras de la literatura clásica. A los ocho años, entre 1657 y 1659, ganó un libro por una loa compuesta en honor al Santísimo Sacramento, según cuenta su biógrafo Diego Calleja. El mismo jesuita señala que Juana Inés radicó en la ciudad de México desde los ocho años, aunque se tienen noticias más veraces de que se asentó allí hasta los trece quince.

Descubrió la biblioteca de su abuelo y así se aficionó a los libros. Aprendió todo cuanto era conocido en su época, es decir, leyó a los clásicos griegos y romanos, y la teología del momento. Las rígidas costumbres de la época impedían que una mujer accediera a la educación superior, por lo que Juana le propuso a su madre disfrazarse de hombre para asistir a la universidad, según ella misma escribió.

Sobre sus primeros años cuenta Ezequiel Chávez que la niña Juana poseia un hermoso cabello. Sin embargo, se preocupaba porque su pelo crecía rápidamente y ella no lograba aprender lo que deseaba. Así, según Calleja, Juana Inés cortaba su cabello a razón de cuatro o cinco dedos y lo hacía cada vez que no conseguía dominar un tema.

Origen de San Miguel Nepantla

Los orígenes de San Miguel Nepantla comienzan a mediados del siglo XVI como una hacienda propiedad de los padres dominicos de la Ciudad de México, en el año de 1639, el entonces Virrey de la Nueva España, Lope Díez de Aux de Armendáriz, Marqués de Cadereyta, concendió a los indígenas de Nepantla ser considerados como una media república de indios, que en 1808 fue constituida en república completa. Los dominicos arrendaban la hacienda, y uno de esos arrendatarios fue Pedro Ramírez de Santillana, abuelo de quien llegaría a ser Sor Juana Inés de la Cruz, quien nació en dicha hacienda el 12 de noviembre de 1648 o 1651 según diversas fuentes, con el nombre de Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana, de la casa donde nació Sor Juana se preservan en la actualidad parte de las paredes de la cocina, resguardadas en el Centro Cultural Sor Juana Inés de la Cruz, museo inaugurado en 1995 en donde se preservan dichos restos así como otros objetos y pinturas de la época colonial, el impulso al rescate del lugar de nacimiento de Sor Juana se dio a partir de 1942 por iniciativa del entonces gobernador del Estado de México, Isidro Fabela, por propia inicitiva, el 14 de julio de 1945 el Congreso del Estado de México modificó oficialmente el nombre de San Miguel Nepantla a Nepantla de Sor Juana Inés de la Cruz.

Ubicacion

Nepantla se encuentra localizado en el extremo sureste del Estado de México, en el municipio de Tepetlixpa a unos 18 kilómetros de distancia de la cabecera municipal, el pueblo de Tepetlixpa y casi en el límite del Estado de México con el estado de Morelos, sus coordenadas geografícas son 18°58′49″N 98°50′27″O / 18.98028, -98.84083 y su altitud es de 2,010 metros sobre el nivel del mar. De acuerdo con los resultados del conteo de población y vivienda de 2005 realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía su población total es de 2,153 personas, de las cuales 1,028 son hombres y 1,125 son mujeres.